domingo, enero 21, 2007

Exposiciones de pintura flamenca de la colección Gerstenmaier


CIUDAD REAL (16-01-07/11-02-07)
Museo López Villaseñor (c/ Reyes, 11)
ALBACETE (14-02-07/10-03-07)
Centro Cultural CCM (c/ San José de Calasanz)
CUENCA (14-03-07/13-04-07)
Centro Cultural CCM (c/ Cardenal Gil de Albornoz, 1)
PUERTOLLANO (18-04-07/13-05-07)
Auditorio Municipal (Pl/ Mariana Pineda)
ARANJUEZ (17-05-07/10-06-07)
Centro Cultural Isabel de Farnesio (c/ Capitán, 39)

El Museo Lopez Villaseñor de Ciudad Real ha abierto sus puertas a una gran exposición "La pintura flamenca en la colección Gerstenmaier" organizada por la obra social de Caja Castilla La Mancha.

«Tener una colección de Arte y no mostrarla es como hacer cine y no enseñar la película al público». El alemán afincado en España Rodolfo Gerstenmaier es uno de los escasos coleccionistas privados de nuestro país que se ha atrevido a exhibir en vida una parte sustancial de sus impresionantes fondos de pintura: sus 30 cuadros facturados en los Países Bajos y que llegaron a la Península entre los siglos XVI y XVIII.

Muy apreciados hasta el final del Barroco, estos óleos de origen flamenco —entonces parte de nuestro Imperio— son una lección del paso de los gustos tradicionales al dominio, por primera vez, de las preferencias de una burguesía en ascenso. Incluso si compraba temas religiosos, esa burguesía empezó a imponer el condicionante de que contuviesen elementos decorativos que reflejasen su nivel económico. Con esta pintura flamenca, podemos ver cómo arribaron a España los primeros bodegones, las naturalezas muertas o las recargadas filigranas florales.

Del mismo modo, con el alemán Rodolfo Gerstenmaier nos ha llegado un nuevo tipo de coleccionista: el que no se niega a mostrar las piezas que aún hoy sigue buscando, comprando y atesorando y que ya suman, desde el Gótico hasta las vanguardias clásicas, 150 obras. «Para mí —explica—, es incomprensible que una persona pública, con un alto estatus social, no abra las puertas de su casa para mostrar su colección, ya sea por miedo a la delincuencia o por puro egoísmo. Al final, se sabe quién es o no es coleccionista. Por suerte, lentamente, las puertas de esas casas se van abriendo en España».

Efectivamente, nos sobrarían los dedos de una mano para contar los coleccionistas españoles dispuestos a mostrar en una exposición sus fondos. Gerstenmaier, al que no le tembló el pulso para vender su empresa y destinar el 20% de sus beneficios directamente a la compra de arte, se muestra convencido de que en España hay oportunidades para «adquirir obras clásicas porque aún es un mercado más abierto que el resto de Europa».

De este modo, presenta el recorrido histórico y estético de la pintura flamenca en España, empezando por los primeros óleos de marcado carácter religioso y acabando por las naturalezas muertas y los bodegones, destacando siempre los competidores, imitadores y colaboradores de Rubens que dieron el banderazo de salida al realismo y el naturalismo o a la pintura de paisaje. Hablamos de Adrian de Gryef, Huysmans, Jan Brueghel, Verbruggen El viejo, Francken II, el mismísimo Van Dyck...

Además de los casi 30 cuadros, la muestra se completa con dos bargueños de extraordinaria calidad, también importados de los territorios flamencos, y parte de la mejor obra gráfica de aquellos tiempos: nueve aguafuertes de Anton van Dyck, con retratos de los hombres ilustres de la época, dibujados del natural, y ocho sensuales grabados a buril de Goltzius inspirados en los textos de Ovidio.

Pero si Gerstenmaier tuviese que elegir una obra, se quedaría con la dedicada a la diosa Ceres, realizada por Abraham Janssens, y que es una réplica clasicista a otra de tema similar de Rubens, que se encuentra en El Prado.

Al revés de la de Janssens, la de Rubens rebosa barroquismo por los cuatro costados. Para acabar de rizar el rizo, ambos óleos contaron con colaboradores idénticos. Por ejemplo, Snyder, un maestro especializado en la pintura de alimentos y animales, que trabajó para ambos y que nos permite dar el salto de la mayor colección privada flamenca a nuestra pinacoteca nacional.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Mis felicitaciones al Sr. Gerstenmaier por su maravillosa colección y mi agradecimiento por su grandeza en compartirla con todos nosotros.

Teresa dijo...

Justo estoy buscando grabados en sellos para mi marco, gracias por la información.